De niño, estudió piano y luego pasó al clarinete cuando se interesó en el jazz durante su adolescencia. Estudió arquitectura, profesión que abandonó en 1971 para entrar en Les Luthiers como sustituo de Marcos, que se tomó un año sabático; cuando se reincorporó Ernesto ya era uno más en el grupo.

Sus primeras composiciones fueron temas de jazz, aunque luego creó otras muy diversas; como intérprete destacaba con los instrumentos de viento, si bien también toca excelentemente el piano, y sus dotes de actor le fueron aupando cada vez a papeles con mayor protagonismo; quizá sus personajes más recordados son los de Don Rodrigo Díaz de Carreras y el niño de La Gallina Dijo Eureka. Por otra parte, también se implicó en la construcción de varios instrumentos informales, por lo que fue un luthier muy completo, y al abandonar el grupo en 1986, tras quince años en él, dejó un hueco enorme.

¿Por qué salió de Les Luthiers? No hay una explicación "oficial", pero sin duda se trató de diferencias irreconciliables, posiblemente acerca de cómo debía evolucionar el conjunto.

Tras su salida emprendió una notable carrera artística en solitario; en 1988 fundó La Banda Elástica, nucleando a destacadas figuras del jazz argentino. El grupo se disolvió en 1993.